Language
Country/Area
No result found
¿Por qué las lesiones del ántrax a vista de pájaro tienen un impacto tan grande en la industria de la uva?
La antracnosis de la uva, causada por el hongo fitopatógeno Elsinoë ampelina, es una enfermedad que amenaza seriamente a la industria de la uva. Se ha demostrado que esta enfermedad afecta a gran variedad de especies vegetales, especialmente a la uva y a determinadas moras, frambuesas, etc. Las características más distintivas de la antracnosis son las lesiones en "ojo de pájaro" en los frutos y las lesiones hundidas de color negro o gris en las hojas y ramas.
Estas lesiones no sólo afectan el rendimiento de la uva, sino que también amenazan la calidad de la uva, provocando enormes pérdidas económicas.
Las lesiones de antracnosis aparecen primero en las ramas jóvenes y se expanden con el tiempo. Si esta situación no se previene y trata a tiempo, puede provocar la muerte de la planta. El impacto de esta enfermedad es particularmente evidente a mediados del verano, especialmente en la industria vitivinícola donde la calidad de la producción es alta.
Huésped y síntomas
El principal huésped afectado por E. ampelina son las uvas, especialmente las uvas de vinificación europeas. Además, algunas plantas silvestres de Polygonaceae también pueden resultar infectadas. La antracnosis aparece primero como pequeñas manchas rojas, redondas, que aparecen como depresiones en las hojas jóvenes y los frutos de las plantas, y eventualmente pueden afectar el suministro y el desarrollo de toda la hoja.
Estas lesiones tienen impacto en todas las etapas del crecimiento de la uva, especialmente durante el ablandamiento del fruto.
Ciclo de la enfermedad
Al final de la temporada de la enfermedad, el hongo antracnosis forma bultos duros, generalmente en los bordes de las lesiones infectadas. Estos bultos duros son estructuras que sobreviven al invierno. En primavera, a medida que aumenta la humedad, las esporas producidas por estos grumos duros serán dispersadas por la lluvia e infectarán hojas y frutos nuevos, lo que provocará la propagación de la enfermedad.
Cabe señalar que esta enfermedad es particularmente propensa a desarrollarse en ambientes con alta humedad y altas temperaturas, lo que puede tener graves consecuencias para los cultivos.
Factores ambientales
El ántrax prospera especialmente en ambientes húmedos. Las salpicaduras de lluvia aceleran la propagación de la enfermedad y el tejido vegetal fresco es el más susceptible. Las enredaderas demasiado crecidas reducen el movimiento del viento, lo que hace que las plantas permanezcan húmedas por más tiempo, lo que también promueve el desarrollo de enfermedades.
La antracnosis es más grave en años húmedos o en suelos con mal drenaje.
Estrategias de gestión
La clave para un control eficaz del ántrax reside en el manejo higiénico. El cuidado incluye eliminar las ramas infectadas durante el período de inactividad para reducir la fuente de enfermedades en la primavera. Al mismo tiempo, plantar variedades resistentes, como las estadounidenses “Concord” y “Niagara”, puede reducir significativamente las posibilidades de infección.
Durante los meses de invierno a principios de la primavera, a menudo se usa una solución de cal y azufre para controlar enfermedades y prevenir posibles brotes de enfermedades. A medida que avanza la temporada de crecimiento, se deben aplicar pulverizaciones foliares con regularidad para proteger el tejido nuevo en crecimiento.
Importancia
El impacto de la antracnosis no es sólo que causa pérdidas significativas en la apariencia, sino que también afecta los beneficios económicos de la industria de la uva en diversas circunstancias durante toda la temporada de crecimiento. Esta enfermedad no sólo hace que las uvas no sean aptas para la elaboración de vino, sino que también afecta en gran medida el rendimiento de las uvas, especialmente durante el período crítico de maduración de la fruta, de julio a septiembre de cada año, provocando así un impacto negativo en toda la industria.
Ante esta enfermedad global, los productores de uva deberían pensar más en cómo gestionar y prevenir eficazmente la propagación del ántrax en condiciones ambientales cambiantes. ¿Qué tipo de desafío es este?
