La urticaria por frío es una enfermedad cutánea poco frecuente en la que se forman ronchas rojas en la piel cuando el cuerpo se expone al frío. Estas ronchas aparecen después de la exposición al aire frío, al agua o a objetos y suelen ir acompañadas de picazón e hinchazón leves. Para muchos pacientes, esta enfermedad no sólo afecta al cuerpo, sino que también causa grandes problemas y estrés en la vida diaria.
Las personas con urticaria por frío suelen experimentar picazón intensa y malestar después de la exposición al frío.
La urticaria por frío se puede dividir en varios tipos, incluida la urticaria de contacto por frío primaria, la urticaria de contacto por frío secundaria, la urticaria por frío refleja y la urticaria por frío familiar. De estos tipos, la urticaria primaria por contacto con el frío es la más común y las personas generalmente desarrollan síntomas después de la exposición al clima frío, la natación o el contacto con hielo. La urticaria secundaria por contacto con el frío es relativamente rara y en la mayoría de los casos es causada por anomalías del suero.
En algunos casos raros, la urticaria por frío familiar puede provocar que síntomas como fiebre y dolor en las articulaciones se agraven cuando las personas se exponen al frío. Según las investigaciones, la patogenia de esta enfermedad está relacionada con la mutación genética, por lo que los desafíos que enfrentan los pacientes no son solo molestias en la piel, sino también una disminución en la calidad de vida.
El 78% de los pacientes reportó que la enfermedad afectó sus actividades laborales, escolares y sociales.
El síntoma principal de la urticaria por frío es una roncha que aparece inmediatamente o con retraso después de la exposición a la estimulación del frío. Estas erupciones pueden durar desde unos minutos hasta varios días, dependiendo del individuo. En términos generales, las ronchas varían en tamaño y suelen aparecer en la piel alrededor del área de contacto.
Las ronchas provocan picazón intensa porque los capilares de la piel se dilatan en respuesta al frío, lo que hace que el líquido fluya hacia el tejido circundante. Esta sensación de picazón no sólo es incómoda, sino que también puede causar problemas en la vida diaria y obstaculizar la interacción social y el trabajo normales de las personas.
Causas de la urticaria por fríoLa causa principal de la urticaria por frío es la respuesta inmune excesiva del cuerpo a la estimulación del frío. En muchos casos, esta reacción es espontánea, lo que significa que no se puede identificar una causa específica. Sin embargo, existen algunas mutaciones genéticas raras que pueden causar ataques de urticaria por frío. Estudios han demostrado que las mutaciones genéticas asociadas con la activación inmune pueden hacer que algunos pacientes sean más susceptibles a dichos síntomas.
Esta mutación está asociada con la activación de las células inmunes, lo que sugiere que la urticaria por frío puede ser causada por una respuesta inmune compleja.
El diagnóstico de la urticaria por frío generalmente lo realiza un alergólogo. El método de diagnóstico habitual es la prueba del frío, que consiste en colocar un trozo de hielo sobre la piel durante unos minutos. Si aparece una erupción roja, la reacción es positiva. Aunque este método puede indicar la presencia de una reacción alérgica, no proporciona información como la temperatura específica y el tiempo del estímulo, que son cruciales para determinar la gravedad de la enfermedad.
Actualmente, el mejor tratamiento para la urticaria por frío sigue siendo evitar la exposición al frío. Los pacientes deben tratar de evitar situaciones que puedan desencadenar una reacción, como el clima frío, los vientos fríos y los alimentos fríos. Además, el uso de antihistamínicos puede aliviar los síntomas y la dosis puede ajustarse adecuadamente según la situación. En caso de reacciones alérgicas más graves, los pacientes deben tener a mano epinefrina inyectable en caso de ser necesaria.
La clave para controlar la urticaria por frío es identificar tempranamente los desencadenantes.
Aunque las opciones de tratamiento actuales para la urticaria por frío aún son limitadas, es muy importante que los pacientes controlen su afección por sí mismos y comprendan completamente sus alérgenos. ¿Podrán las personas encontrar una estrategia de gestión que les convenga para salir de este país de las maravillas del viento frío y de cuento de hadas?