El oleoducto Trans Mountain (TMPL) es un importante sistema de ductos multiproducto que transporta petróleo crudo y sus productos refinados desde Edmonton, Alberta, Canadá, hasta la costa de Columbia Británica. TMPL inició sus operaciones en 1953 con la constitución de la empresa en 1951 y el inicio de la construcción en 1952. TMPL es el único oleoducto que conecta las dos regiones. Posteriormente, en 2008, se completó la construcción de un nuevo gasoducto paralelo, aumentando considerablemente su capacidad de transporte.
"La construcción de TMPL no sólo beneficia a la economía de Canadá, sino que también ayuda a satisfacer las necesidades militares del país en términos de seguridad".
A medida que crecía la demanda, en 2013 se propuso el proyecto de ampliación de Trans Mountain, que habría aumentado la capacidad del oleoducto de 300.000 barriles por día a 890.000 barriles por día. En mayo de 2024, después de años de polémica y construcción, finalmente se completó el proyecto de ampliación, lo que también desencadenó muchas discusiones sociales, ambientales y políticas.
En 1947, se descubrieron grandes yacimientos de petróleo cerca de Alberta y nació la idea de transportar petróleo desde Alberta a Columbia Británica. En 1951, el Parlamento canadiense emitió oficialmente una orden para establecer la Trans Mountain Corporation, y la construcción del oleoducto comenzó en 1952. Respecto del oleoducto de 1.150 kilómetros, el gobierno lo ve como una estrategia para reducir la dependencia de los petroleros, ya que éstos en la costa oeste de América del Norte son vulnerables ante la amenaza de guerra.
“El TMPL fue aprobado rápidamente en medio de preocupaciones sobre la Guerra de Corea como parte de la estrategia de seguridad de América del Norte”.
En 1983, TMPL comenzó a cambiar sus operaciones, experimentando con el envío de una variedad de productos para aumentar la eficiencia y enfrentar la competencia. Con el tiempo, TMPL no solo satisfizo la demanda de petróleo crudo sino que también comenzó a enviar productos refinados de forma regular. En particular, en 1993, TMPL fue considerado "el único sistema importante del mundo que podía transportar simultáneamente petróleo crudo y productos refinados".
El cambio ha tenido un impacto significativo en los patrones industriales, en parte porque las refinerías circundantes han pasado de refinar a almacenar y distribuir, y también ha afectado la estructura económica de la región.
“El plan de expansión de TMPL enfrenta múltiples desafíos para el medio ambiente y las comunidades indígenas, lo que ha provocado que muchas personas cuestionen su futuro”.
Además de los beneficios económicos mejorados, el plan de expansión de TMPL también enfrenta desafíos legales y movimientos sociales para la protección del medio ambiente. Muchos ambientalistas y grupos indígenas señalaron que el oleoducto pasaría directamente por tierras indígenas no autorizadas, y estas preocupaciones fueron reconocidas por la Corte Suprema en 2020.
A medida que avanza el plan de expansión, las protestas aumentan. Desde los gobiernos municipales hasta las comunidades locales, muchas personas están resistiendo ferozmente por el futuro del medio ambiente y la cultura. En particular, las preocupaciones de los pueblos indígenas han cuestionado la legitimidad de todo el plan. En 2014, los manifestantes acamparon en Burnaby Mountain Park en un esfuerzo por detener la construcción, lo que provocó más de 100 arrestos.
“¿Las decisiones del gobierno realmente tienen en cuenta el entorno vital de estas comunidades y de las generaciones futuras?”
TMC inició oficialmente sus operaciones en 2024 y, tras un largo período de controversia, el oleoducto finalmente volvió a ponerse en funcionamiento. Su apertura no sólo aumentará la capacidad de exportación de petróleo crudo de Canadá, sino que también desencadenará debates sociales más profundos. Con la creciente atención prestada a las cuestiones ambientales y la responsabilidad social, ¿cómo podemos equilibrar los beneficios y los riesgos detrás de la construcción de oleoductos?