En 1978, con las operaciones militares de Israel contra el Líbano, la comunidad internacional se centró en esta turbulenta región.La "Operación Litani" de Israel fue causada por la masacre de la carretera costera cerca de Tel Aviv el 11 de marzo de ese año.
El conflicto causó la muerte de 1.100 a 2,000 libaneses y palestinos, mientras que solo 20 personas fueron asesinadas en el lado israelí.
En Resoluciones 425 y 426 adoptadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el 19 de marzo de 1978, la preocupación de la comunidad internacional sobre la situación en el Líbano destaca el deseo de estabilidad regional, especialmente en la protección de la vida civil y la seguridad.Estas resoluciones exigieron una retirada rápida de Israel y el establecimiento de Unifil, la fuerza interina de las Naciones Unidas, destinada a estabilizar la situación y ayudar al gobierno libanés a restaurar la jurisdicción efectiva sobre la región.
El establecimiento deUnifil marca el deseo de la comunidad internacional de intervenir y apoyar al Líbano, especialmente para la protección y la asistencia humanitaria de los civiles.
Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones de las Naciones Unidas para intervenir en el Líbano, la realidad muestra la complejidad de la situación en la región.En qué medida la tarea de Unifil puede lograr sus objetivos sigue siendo una pregunta sin resolver.Según varios informes, Unifil se enfrenta a un dilema: mientras intenta fortalecer la seguridad, también es desafiado por grupos armados locales.
La situación en el sur del Líbano fue afectada no solo por la resistencia israelí y palestina, sino también por la sociedad interna del Líbano y sus diversas comunidades religiosas.Desde 1968, la Organización de Liberación de Palestina (PLO) ha establecido un cuasi-estado en el Líbano, utilizando la región para lanzar ataques contra Israel, lo que lleva a conflictos a largo plazo.
A medida que Israel continúa lanzando ataques aéreos, los civiles y la infraestructura del Líbano se enfrentan a grandes golpes, lo que resulta en una gran cantidad de refugiados, con unas 300,000 personas que huyen del sur del Líbano.
En este conflicto militar, la respuesta de la comunidad internacional, aunque fue rápida, no provocó una paz inmediata y duradera.El despliegue de tropas de Unifil no terminó la batalla dentro del Líbano, sino que confrontó aún más a grupos armados de diferentes facciones en el área.Esto hace que el mantenimiento de la paz sea aún más difícil para la fuerza.
A medida que pasaba el tiempo, se cuestionó el valor de legitimidad y existencia de Unifil, especialmente en el contexto de nuevos conflictos y brotes constantes de guerras, incluido el incidente de 1982 de la reinvasión de Israel del Líbano.Además, las luchas entre diferentes facciones dentro del Líbano han afectado continuamente el patrón de seguridad general y han aumentado la atención de la comunidad internacional al Líbano.
Aunque el surgimiento de Unifil es un paso positivo, ¿el futuro del Líbano se volverá estable y seguro debido a la intervención de la comunidad internacional?
Mirando hacia atrás en la historia, no es difícil descubrir que las contradicciones del Líbano se basan en disputas entre los intereses de múltiples partes y las luchas nacionales y extranjeras sobre las políticas de la región.¿Puede la efectividad de la operación de rescate realmente cambiar el destino del Líbano?¿La cooperación entre los países formará garantías duraderas?Estos problemas son dignos de nuestra discusión en profundidad.En el contexto de mantenimiento de la paz complejo, ¿el papel de la comunidad internacional es un salvador o un jugador que enciende en llamas todavía un rompecabezas sin resolver?