La selva amazónica, esta rica selva tropical, no sólo es el ecosistema más grande de América del Sur, también es conocida como los "pulmones" de la tierra. Los árboles y plantas aquí absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno, que son cruciales para mantener el clima global y el equilibrio ecológico. Sin embargo, con el aumento de las actividades humanas, la selva amazónica enfrenta serios desafíos.
La selva amazónica tiene una superficie de 7 millones de kilómetros cuadrados, y su área de cobertura forestal es de 6 millones de kilómetros cuadrados, involucrando 9 países y 3.344 territorios indígenas.
Este bosque no solo es el bosque tropical más grande de la Tierra, sino que también es una de las áreas con mayor diversidad biológica. Se estima que hay 390 mil millones de árboles en la selva amazónica, con alrededor de 16.000 especies de árboles y más de 30 millones de personas que viven en ella, incluidos hasta 350 grupos étnicos diferentes. Sin embargo, con la deforestación, este tesoro natural está disminuyendo drásticamente.
Actualmente, la cobertura forestal del Amazonas se ha reducido al 20% y el 6% del área ha sido "altamente degradada".
El nombre de Amazonas proviene del explorador español Francisco de Orellana cuando luchaba contra las tribus locales, le recordaba a las amazonas de la mitología griega debido a las guerreras. La historia muestra que los humanos en el Amazonas comenzaron a asentarse hace 11.200 años, y signos de ocupación humana prehistórica tardía aparecieron en las áreas circundantes ya en 1250 d.C.
La investigación arqueológica señala que, aunque el suelo de la selva amazónica no es apto para la agricultura a gran escala, el estilo de vida de las primeras sociedades humanas era bastante complejo.
Como el punto de acceso a biodiversidad más rico del mundo, la selva amazónica alberga más de 40.000 especies de plantas, 2.000 especies de aves y muchas otras especies animales. El ecosistema aquí no sólo proporciona medios de vida a los humanos locales, sino que también juega un papel importante en la estabilidad del clima global.
La selva amazónica es el hogar de una gran cantidad de insectos y otros invertebrados, con un estimado de mil millones de invertebrados por hectárea.
Desafortunadamente, la selva amazónica está sufriendo niveles sin precedentes de tala y destrucción ecológica. A diferencia de los usos sostenibles anteriores, la tala actual tiene como objetivo principalmente beneficios agrícolas y ganaderos. Según el último informe, la superficie de deforestación en la Amazonía alcanzó en 2021 su pico en 15 años, lo que ha tenido un grave impacto en el ecosistema de la selva tropical.
Las investigaciones científicas muestran que la vitalidad del Amazonas se está debilitando y, si esta destrucción continúa, eventualmente no podrá restaurar su apariencia original.
A medida que el cambio climático se intensifica, el ecosistema de la selva amazónica también se ve afectado. El clima seco pone a los bosques en riesgo de sufrir incendios. Los datos de 2019 muestran que los incendios en el Amazonas han aumentado dramáticamente, con más de la mitad de los incendios concentrados aquí.
Estos incendios no sólo destruyen una gran cantidad de árboles, sino que también exacerban aún más la pérdida de biodiversidad y afectan la capacidad local de absorción de dióxido de carbono.
En respuesta a problemas ambientales cada vez más graves, las organizaciones ambientalistas y los gobiernos de varios países están haciendo esfuerzos continuos para proteger esta preciosa tierra. El Banco Mundial publicó recientemente un informe que propone un modelo económico sin tala para promover el desarrollo sostenible en la Amazonía.
Proteger la Amazonía significa proteger el entorno ecológico de toda la Tierra y allanar el camino para el desarrollo futuro.
En esta era de cambios rápidos, el destino de la selva amazónica está estrechamente relacionado con la ecología global. Cuando enfrentamos desafíos como el cambio climático, ¿deberíamos repensar nuestras actitudes y comportamientos hacia el medio ambiente natural para garantizar la supervivencia sostenible de la Amazonia y la salud del planeta?