La teoría de control se divide en dos ramas principales: teoría de control lineal y teoría de control no lineal. La teoría de control lineal se aplica a sistemas que obedecen al principio de superposición y se describen mediante ecuaciones diferenciales lineales.
La característica clave de los sistemas lineales es que sus soluciones pueden basarse en una variedad de técnicas matemáticas, como las transformadas de Laplace, las transformadas de Fourier, etc. Sin embargo, muchos sistemas reales son de naturaleza no lineal, por lo que la aplicación de la teoría de control no lineal se está volviendo cada vez más extensa. Aunque esta teoría es más complicada, también cubre tipos de sistemas más allá de los sistemas lineales.
Las características de los sistemas no lineales hacen que las técnicas de análisis tradicionales a menudo sean difíciles de manejar, incluidos múltiples puntos de equilibrio aislados, ciclos límite y caos estructural. Si el sistema fluctúa únicamente alrededor del punto estable y no se considera el comportamiento a gran escala, el sistema no lineal generalmente se puede linealizar y convertir en un problema lineal correspondiente para su procesamiento.
Los avances en la tecnología informática moderna han hecho que la simulación no lineal sea más factible y los investigadores pueden utilizar lenguajes de simulación para realizar análisis numéricos en estos sistemas.
Por ejemplo, un sistema de calefacción doméstica puede verse como un sistema de control no lineal. La respuesta de este sistema es discontinua, es decir, cuando la temperatura baja al límite inferior establecido, el sistema enciende la calefacción y se apagará nuevamente cuando la temperatura alcance el límite superior. Este cambio periódico de temperatura se denomina ciclo límite y presenta características típicas de control no lineal.
Una de las características clave de los sistemas no lineales es que no obedecen el principio de superposición. Esto significa que su respuesta no es una simple suma o multiplicación de parámetros. Los sistemas no lineales pueden exhibir un comportamiento caótico o múltiples características de estado estable bajo ciertas condiciones, lo que plantea desafíos adicionales a los ingenieros en el diseño y operación del sistema.
Existen muchas técnicas maduras que pueden aplicarse en el análisis y control de sistemas no lineales, incluido el método de la función descriptiva, el método del plano de fase y el análisis de estabilidad de Lyapunov.
En el diseño de control no lineal, los ingenieros pueden considerar el uso de programación de ganancia, linealización de retroalimentación y métodos de base de Lyapunov. Estos métodos pretenden transformar un comportamiento no lineal complejo en un problema lineal manejable, aunque dicho proceso requiere una planificación y un diseño cuidadosos.
Aunque la teoría lineal tradicional ha desarrollado muchos criterios de estabilidad (como el criterio de estabilidad de Nyquist), el desarrollo de la teoría de control no lineal en esta área es relativamente insuficiente. En el caso de los sistemas no lineales, a menudo es necesario introducir más conceptos matemáticos y teoremas para garantizar la estabilidad, entre los que el comportamiento de puntos aislados también es un ámbito de investigación clave.Por ejemplo, el problema de Lur'e propone un marco analítico clásico para sistemas de retroalimentación no lineal, que explora principalmente la estabilidad del sistema bajo ciertas condiciones.
La base teórica del control no lineal es cada vez más sólida. Entre ellos, el teorema de Frobenius proporciona una descripción matemática del comportamiento del movimiento de los sistemas no lineales en condiciones específicas. Estos resultados matemáticos detallados nos ayudan a comprender y predecir mejor el comportamiento de los sistemas no lineales. sistemas no lineales.
Con la profundización de la investigación sobre la teoría del control no lineal, ¿qué descubrimientos impactantes nos traerá la tecnología futura?