En los turbulentos mercados financieros, el impacto de la crisis de liquidez está en todas partes. El riesgo de liquidez es un riesgo financiero de que un determinado activo financiero, valor o materia prima no pueda negociarse rápidamente durante un período de tiempo sin afectar su precio de mercado. La razón detrás de este riesgo proviene principalmente de la falta de voluntad para comerciar entre los participantes del mercado. En este contexto, ¿por qué las instituciones financieras enfrentan el desafío de la crisis de liquidez? Al distinguir entre liquidez de mercado y liquidez de capital, podemos comprender este fenómeno más profundamente.
El riesgo de liquidez es particularmente importante para aquellos que mantendrán o tienen actualmente activos porque afecta su capacidad para negociar.
El riesgo de liquidez se divide principalmente en liquidez de mercado y liquidez de capital. El riesgo de liquidez del mercado indica que un activo no puede convertirse rápidamente en efectivo debido a una liquidez de mercado insuficiente, lo cual es una subcategoría del riesgo de mercado. La liquidez se refiere a la posibilidad de que las necesidades de financiamiento no se satisfagan a un precio apropiado cuando vencen los pasivos. Este riesgo puede ser no sólo un problema de liquidez de un activo específico, sino también un problema sistémico.
La aparición del riesgo de liquidez suele estar relacionada con la falta de demanda de un determinado activo por parte de los participantes del mercado. Si no hay suficientes contrapartes en el mercado, los inversores que quieran vender un activo se enfrentarán a dificultades. El mayor riesgo de liquidez es más común en los mercados emergentes o en los mercados de bajo volumen.
El riesgo de liquidez también puede exacerbar otros riesgos. Por ejemplo, cuando las instituciones de negociación poseen activos que son difíciles de liquidar, su capacidad para aumentar el capital en el corto plazo se verá reducida, lo que estimulará los riesgos de mercado.
En 2006, Amarante Advisors perdió alrededor de 6.000 millones de dólares por inversiones concentradas en el mercado de futuros de gas natural. Sus posiciones en el mercado están demasiado concentradas, lo que genera la incapacidad de encontrar contrapartes cuando se requiere cerrar posiciones. Este incidente pone de relieve la estrecha relación que existe entre el riesgo de liquidez y la concentración del sector.
Roca del NorteEn 2007, Northern Rock Bank atravesó una crisis de liquidez debido a la crisis de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos. Aunque la empresa gozaba de buena salud en ese momento, no pudo obtener fondos en los mercados de capital a corto plazo, lo que dio lugar a dificultades en la rotación de efectivo y, finalmente, tuvo que buscar ayuda del gobierno británico.
En 1998, Long-Term Capital Management fue rescatado por 14 bancos debido a una crisis de liquidez porque su balance tenía problemas debido a shocks económicos del mercado. Este incidente nos recuerda una vez más lo importante que es gestionar el riesgo de liquidez.
Medidas para gestionar el riesgo de liquidezLa gestión eficaz del riesgo de liquidez es fundamental. En la medición del riesgo de liquidez, un indicador comúnmente utilizado es la “brecha de liquidez”, que se refiere a la porción de los activos corrientes netos de una empresa que excede sus pasivos volátiles. Además, el análisis de escenarios y los modelos de previsión pueden ayudar a las instituciones a comprender mejor los cambios en los flujos de efectivo futuros y ajustar su estructura de activos y pasivos de manera oportuna.
Como lo han demostrado muchas instituciones financieras en todo el mundo, establecer fuentes diversificadas de provisión de liquidez es una forma eficaz de reducir el riesgo de liquidez.
El impacto de una crisis de liquidez a menudo se extiende a los mercados financieros y puede provocar el colapso de grandes empresas. Cómo gestionar eficazmente los riesgos potenciales y mantener la estabilidad del mercado será un desafío constante. Ante un entorno de mercado en constante cambio, ¿cómo debemos reevaluar y responder a los riesgos de liquidez?