Los mercados financieros son un sistema dinámico y complejo, y el riesgo de liquidez es sin duda uno de sus componentes más desafiantes. Este riesgo se refiere a la incapacidad de un activo financiero, valor o materia prima de negociarse rápidamente en el mercado durante un período de tiempo determinado sin afectar el precio de mercado. Esto significa que, en momentos críticos, los inversores pueden enfrentarse al dilema de no poder liquidar rápidamente sus activos, lo que supone una amenaza potencial para la estabilidad del mercado.
El riesgo de liquidez no es sólo un número o un modelo, afecta la flexibilidad de cada inversor y su estrategia de asignación de activos.
Los principales tipos de riesgo de liquidez se pueden dividir en liquidez de mercado y liquidez de financiación. La liquidez del mercado significa que los activos no pueden venderse debido a la falta de liquidez del mercado, mientras que la liquidez de financiamiento se refiere a la incapacidad de recaudar fondos a un precio adecuado cuando los pasivos vencen. Estos dos tipos de riesgos a menudo se retroalimentan, dando lugar a condiciones de mercado más severas.
La causa fundamental del riesgo de liquidez radica en el desequilibrio entre la oferta y la demanda entre los participantes del mercado. En un mercado, si una parte quiere negociar un activo pero no hay ninguna contraparte dispuesta a hacerlo, la liquidez se agotará. El riesgo de liquidez suele ser más significativo, especialmente en mercados emergentes o mercados con menores volúmenes de negociación.
Las crisis de liquidez a menudo se manifiestan en shocks repentinos del mercado y son más evidentes cuando los inversores acumulan efectivo en lugar de participar activamente en el mercado.
Una institución puede enfrentar un riesgo de liquidez debido a salidas de efectivo inesperadas, una rebaja en su calificación crediticia o apatía del mercado hacia ciertos activos. Además, la interacción de los riesgos de mercado y de liquidez dificulta la venta de activos cuando otros inversores encuentran problemas de financiación, y viceversa. Esta interacción hace que el riesgo de liquidez empeore y su impacto puede extenderse a otros tipos de riesgos, como el riesgo de mercado y el riesgo de crédito.
Para gestionar el riesgo de liquidez, muchas empresas han adoptado diversas medidas, como el modelo de valor en riesgo (VAR) ajustado a la liquidez, que hace que la evaluación del riesgo sea más completa al tener en cuenta el riesgo de liquidez. Este modelo puede calcular el tiempo que llevará vender un activo y puede incorporar factores de tiempo en la evaluación de riesgos.
En cuanto a casos históricos de crisis de liquidez, Amaranth Advisors en 2006 perdió alrededor de 6.000 millones de dólares debido a una concentración excesiva en el mercado de futuros de gas natural. Si no se cierran las posiciones a tiempo, las pérdidas aumentarán y, en última instancia, se volverán irreversibles. En 2007, el banco británico Northern Rock se enfrentó a la quiebra debido a una crisis de liquidez, a pesar de su estructura de capital aparentemente sólida en ese momento, lo que puso de relieve la crueldad de las crisis de liquidez.El modelo VAR ajustado por liquidez no sólo es una herramienta de evaluación de riesgos, sino también un medio importante para prevenir caídas del mercado.
El riesgo de liquidez no sólo afecta a las empresas, sino también a la estabilidad de todo el sistema financiero. Gestionar este tipo de riesgo requiere más que un enfoque único, sino una estrategia diversa. Por ejemplo, establecer múltiples proveedores de liquidez para diversificar los riesgos o cubrir los riesgos de liquidez mediante derivados son estrategias eficaces.
Sin embargo, no existe una herramienta de evaluación estable y estandarizada para las crisis de liquidez. Muchos indicadores, como la diferencia entre los precios de oferta y demanda, la profundidad del mercado y la inmediatez de las transacciones, deben ajustarse y evaluarse de acuerdo con las diferentes condiciones del mercado.
Ante el riesgo de liquidez, los inversores y las empresas no sólo deben comprender la manifestación del riesgo de liquidez, sino también explorar más a fondo sus posibles causas e impactos, y pensar en cómo fortalecer sus propias capacidades de gestión de riesgos. Esta será la clave para abordar con riesgo de liquidez. La clave para la incertidumbre futura del mercado. ¿Cómo podemos garantizar la liquidez de los activos y protegernos contra riesgos potenciales en un entorno de mercado incierto?