Koi no es sólo una especie de pez, sino también un símbolo de cultura y belleza. Estas coloridas carpas han sido las preferidas durante mucho tiempo por los entusiastas de los juegos acuáticos y brillan con su encanto único en estanques de patio y jardines acuáticos. En Japón, el koi se llama "nishikigoi", que significa "carpa brocada". No sólo tiene una larga historia detrás, sino que también conlleva profundas connotaciones emocionales y culturales.
El encanto de los koi radica en sus colores brillantes, patrones únicos y postura elegante. Cada koi es tan único como una obra de arte.
La historia del koi se remonta al Japón de principios del siglo XIX. En esa época, los agricultores descubrieron variaciones de color durante la reproducción. Estas especies de peces mutantes se hicieron populares y evolucionaron gradualmente hasta convertirse en los distintos koi que conocemos hoy. Vale la pena señalar que el proceso de reproducción de estas carpas no es casualidad, es el resultado de una cuidadosa selección y tecnología de cría. Las diferentes variedades se derivan de la combinación de diferentes colores y patrones, lo que da como resultado docenas de variedades en la actualidad, y poco a poco se están volviendo amadas a nivel internacional.
El atractivo de los peces koi no sólo se refleja en su apariencia, sino que también está estrechamente relacionado con su significado simbólico en la cultura japonesa. En la cultura japonesa, los peces koi se consideran símbolos de amor y amistad. Dado que "koi" suena igual que "amor", a menudo se los considera el sustento de las emociones. Muchos entusiastas también sentirán la paz y la poesía de la naturaleza al observar estos peces junto al estanque, trascendiendo así la simple necesidad de peces ornamentales.
Cada carpa koi parece contar una historia, que es la acumulación del tiempo y captura la belleza de la naturaleza y las emociones humanas.
Hoy en día, los koi no sólo son amados en Japón, sino que su encanto ha trascendido las fronteras nacionales y se ha extendido por todo el mundo. Muchos países cuentan con comunidades y asociaciones especializadas. Los entusiastas no sólo comparten experiencias de cría, sino que también organizan concursos periódicos para promover este arte y cultura tradicionales. Especialmente en China, con el desarrollo de la economía, algunas personas ricas han comenzado a comprar koi de alta calidad en grandes cantidades, y el precio puede incluso alcanzar millones, lo que también ha desencadenado una nueva ronda de locura en el mercado de koi.
En términos de cría, los criadores profesionales de koi harán selecciones precisas basadas en el color, la forma de la flor, las escamas y otras características. En Japón existen más de cien variedades diferentes de koi, cada una con su propio nombre y características. Por ejemplo, "Kōhaku" es una variedad con manchas rojas sobre un fondo blanco; "Taishō Sanshoku" añade patrones negros a esta base. Y "Shōwa Sanshoku" es una variante con el negro como cuerpo principal y los colores rojo y blanco.
Ya sea un criador o un espectador, la conexión con el koi es una resonancia emocional, que hace que cada koi brille con luz propia en el agua.
En el mercado internacional, la demanda de koi de alta calidad continúa aumentando. La enorme demanda junto con la oferta limitada ha encarecido algunos koi de alta calidad, y la creación de algunas nuevas variedades ha aumentado la diversidad de koi. Especialmente desde el siglo XXI, con la apertura gradual del mercado, especialmente el entusiasmo de los coleccionistas chinos por los koi, los koi se han convertido en un nuevo favorito para la colección.
En el futuro, los koi, como cristalización de la cultura y el arte, seguramente atraerán más atención. No podemos evitar preguntarnos, con la integración de culturas y los cambios en el medio ambiente, ¿cómo será el futuro de los koi?