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La historia oculta detrás de la industrialización: ¿Cómo promueve el sistema de fabricación estadounidense la alta eficiencia?
El sistema de fabricación estadounidense del siglo XIX fue una serie evolucionada de métodos de fabricación, el más notable de los cuales fue el uso generalizado de piezas intercambiables y la producción mecanizada, que hicieron que el uso de la mano de obra fuera mucho más eficiente que los métodos manuales tradicionales. El sistema fue desarrollado y perfeccionado originalmente en los arsenales de los Estados Unidos, particularmente en Springfield, Massachusetts y Harpers Ferry, Virginia, como proveedores de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos. Este sistema, llamado el "sistema americano", recibió ese nombre no por su carácter americano único, sino porque en el siglo XIX, este sistema estaba estrechamente asociado con las empresas manufactureras americanas y sus métodos de fabricación eran diferentes de los de Gran Bretaña y Europa en ese momento. tiempo. Empresas del continente.
La esencia del sistema estadounidense es que las tres funciones, desde la fábrica hasta el montaje y la reparación, pueden ser realizadas por trabajadores semicalificados, lo que hace que la fabricación sea más eficiente.
Otra característica de este sistema es la implementación de la división del trabajo. A medida que avanzaba la división del trabajo, el proceso de fabricación ya no se limitaba a pequeños talleres artesanales, sino que se trasladaba a las primeras fábricas. Este proceso se evidencia en el hecho de que, a medida que las empresas se expanden en tamaño y aumentan su producción, se emplea cada vez más mano de obra no especializada, especialmente en las empresas más grandes que se centran en la producción de muebles y ropa, y se emplea cada vez más a mujeres y niños. particularmente común.
Importancia de la mecanizaciónEn la industria manufacturera, la aplicación de la mecanización es una parte importante que no se puede ignorar. El nombramiento del fabricante de máquinas-herramienta inglés Joseph Whitworth para la Exposición Internacional de Nueva York le permitió inspeccionar fábricas estadounidenses y redactar un informe que tuvo un impacto de largo alcance. En el informe, señaló:
El número relativamente pequeño de trabajadores se vio compensado por el deseo de la fuerza laboral de reemplazar el trabajo manual con maquinaria. Mientras el trabajo pueda ser sustituido por maquinaria, todos mostrarán este deseo.
Esto ilustra el entusiasmo de la industria manufacturera por la mecanización y su importante contribución a la prosperidad económica de Estados Unidos.
El desarrollo de piezas intercambiables
El sistema de piezas intercambiables se originó en Francia a finales del siglo XVIII, a partir de una propuesta realizada por el general francés Jean-Baptiste Viquet de Griboire. Aunque en aquella época la tecnología aún no estaba madura, este concepto se hizo realidad en el siglo XIX, lo que fue especialmente importante para la fabricación de armas.
Con el avance de la tecnología de fabricación de herramientas, la producción de piezas intercambiables también se ha desarrollado rápidamente. Por ejemplo, a Eli Whitney de Kennedy & Company se le había adjudicado un contrato para producir 10.000 mosquetes en un plazo de tiempo específico. Whitney finalmente logró su objetivo en ocho años, adquiriendo una serie de nuevas tecnologías en el proceso. De hecho, escribió en una carta durante su lento progreso:
Mi objetivo principal es crear herramientas que den forma al propio producto, dando a cada pieza las proporciones adecuadas, lo que dará eficiencia, consistencia y precisión a todo el proceso productivo.
Esta idea facilitó la producción en masa eficiente en futuros procesos de fabricación.
Influencia global
De hecho, a finales del siglo XIX, el llamado "sistema americano" había permeado la industria manufacturera mundial. Muchos años después, podemos ver la implementación de este sistema en todo, desde bicicletas hasta automóviles, especialmente después de que Ford estandarizara la producción del automóvil, lo que demostró cómo hacer que los automóviles fueran asequibles para la clase media a través de métodos eficientes. A medida que la producción se volvió menos intensiva en mano de obra, se entregó más control a la tecnología de producción y la industrialización avanzó a un ritmo asombroso, lo que condujo a la Edad de Oro de la Manufactura estadounidense, liderada por Larson y Aldous.
Sin embargo, el desarrollo de la tecnología y los ingeniosos cambios en los métodos de fabricación han obligado a la gente a reflexionar sobre si el sistema de fabricación puede mantener aún su eficiencia original o si necesita nuevas innovaciones para adaptarse al futuro en el mundo cada vez más globalizado de hoy. Desafíos ?
