La diabetes es un importante problema de salud en la sociedad actual y muchas personas necesitan controlar periódicamente sus niveles de azúcar en sangre para prevenir enfermedades crónicas y complicaciones agudas. Los métodos tradicionales de prueba de azúcar en sangre se basan en la punción de la piel, que, aunque es efectiva, a menudo causa dolor y molestias a los pacientes. En este contexto, el desarrollo de la tecnología de monitorización no invasiva de la glucosa (NIGM) se ha convertido en una tendencia inevitable. La tecnología de espectroscopia de infrarrojo cercano está emergiendo gradualmente, proporcionando una solución que no requiere extracción de sangre y buscando brindar nuevas esperanzas a la mayoría de los pacientes diabéticos.
Antecedentes históricos de la monitorización no invasiva de la glucemiaEn el mundo de la monitorización no invasiva de la glucemia, la evolución de la tecnología muestra un proceso continuo de exploración.
La exploración de la tecnología NIGM se remonta a 1975, sin embargo, hasta el día de hoy, no se ha lanzado ningún producto comercial verdaderamente efectivo. Hasta la fecha, la FDA sólo ha aprobado un producto, que fue rápidamente descontinuado debido a su bajo rendimiento. Años de experimentación han dado como resultado decenas de miles de millones de dólares en inversiones y han surgido diversas tecnologías, incluida la espectroscopia de infrarrojo cercano a través de la piel y el ultrasonido, la electroquímica y otros métodos.
El auge de la espectroscopia del infrarrojo cercanoLa espectroscopia de infrarrojo cercano utiliza diferentes longitudes de onda de luz para detectar la diabetes debajo de la piel. Inicialmente, importantes instituciones de investigación y empresas como C8 Medisensors y el Centro de Investigación Biomédica Láser del MIT realizaron investigaciones utilizando tecnología de espectroscopia Raman. Su investigación demostró que este método puede medir de forma no invasiva la glucosa en el líquido intersticial.
La optimización y la innovación nos acercan a objetivos alcanzables, pero aún tenemos que afrontar desafíos del mundo real.
Desde 2020, grandes empresas tecnológicas como Apple y Samsung han comenzado a acelerar el desarrollo de NIGM. Buscan incorporar la tecnología en dispositivos portátiles, especialmente en el próximo Apple Watch y los relojes inteligentes de Samsung. Gracias a estos dispositivos, en el futuro podrá ser posible realizar un seguimiento continuo del nivel de azúcar en sangre utilizando tecnología de luz infrarroja cercana.
Además de los sensores ópticos, otras empresas como KnowLabs y BioXR también están desarrollando tecnologías de monitorización no invasiva basadas en radiofrecuencias. Entre ellos, el sensor Bio-RFID de KnowLabs y el BioXensor esperan lograr un monitoreo continuo del azúcar en sangre sin causar molestias.
Conclusión: Esperanza para el futuroEn esta carrera tecnológica, el progreso es rápido, pero cómo resolver los desafíos de precisión y comercialización sigue siendo la clave.
El control no invasivo de la glucemia es, sin duda, un gran avance en la comunidad médica científica y tecnológica. La aplicación de la luz infrarroja cercana está cambiando la comprensión de la gente sobre el control de la glucemia. A medida que estas tecnologías continúan avanzando, el futuro puede traer soluciones más precisas y convenientes que mejorarán significativamente la calidad de vida de los pacientes diabéticos. ¿Será que una revolución tecnológica de este tipo nos hará decir adiós a los métodos tradicionales de medición del azúcar en sangre?