En la investigación médica actual, el nombre de Craig Crews se está convirtiendo gradualmente en el centro de atención. Es profesor de biología química en la Universidad de Yale y es ampliamente reconocido por una tecnología llamada PROTAC. PROTAC, o "enfoque inducido por la degradación de proteínas", utiliza moléculas especiales para inducir la interacción de dos proteínas en las células, desencadenando así la degradación de proteínas específicas. Este proceso se denomina degradación de proteínas dirigida (TPD). En el futuro, se espera que esta tecnología aporte avances en muchas enfermedades difíciles de tratar, como el cáncer y las enfermedades neurodegenerativas.
La invención de PROTAC nos brinda la oportunidad de atacar proteínas "ocultas" que antes se consideraban intratables, abriendo una nueva puerta para nuestra investigación.
Craig Crews nació en 1964 y se licenció en química en la Universidad de Virginia en 1986. Luego realizó una investigación en la Universidad de Tübingen en Alemania, seguida de estudios de posgrado en la Universidad de Harvard. Antes de unirse a la Universidad de Yale como profesor asistente, Crews trabajó como investigador becado en el Instituto de Investigación del Cáncer. La carrera académica de Crews se ha centrado en controlar la homeostasis de las proteínas, lo que afecta la renovación de proteínas dentro de las células.
En 2001, Crews colaboró con Ray Deshaies para desarrollar PROTAC, una tecnología innovadora para inducir la degradación de proteínas. PROTAC es una molécula bifuncional que recluta proteínas intracelulares específicas en la maquinaria de control de calidad de la célula, utilizando ubiquitina ligasas E3 para desencadenar la degradación posterior. A medida que avanza esta tecnología, la investigación de Crews también ha tenido un profundo impacto en la dirección futura del tratamiento del cáncer.
La tecnología de PROTAC no solo se dirige a proteínas conocidas resistentes a los medicamentos, sino que también nos da esperanzas de encontrar un tratamiento, que está más allá del alcance de los medicamentos tradicionales de moléculas pequeñas.
La principal importancia de la tecnología PROTAC es que permite que muchas proteínas que antes se consideraban "intratables" se conviertan en nuevos objetivos farmacológicos. Tomando como ejemplo el ARV-471, PROTAC en esta etapa de ensayo clínico ha demostrado su potencial para apuntar a los receptores de estrógenos, y durante su proceso de desarrollo ha recibido la atención y cooperación de grandes empresas como Pfizer.
Sin embargo, aunque PROTAC se muestra prometedor, todavía enfrenta desafíos durante su desarrollo. El gran tamaño de las moléculas de PROTAC hace que lograr la usabilidad oral en ensayos clínicos sea un desafío. Además, cómo controlar eficazmente la especificidad y actividad de PROTAC también es un obstáculo técnico que los investigadores deben superar.
La inversión y la investigación continuas determinarán si la tecnología PROTAC se puede traducir en tratamientos clínicos ampliamente utilizados.
A partir de 2023, Crews ha fundado varias empresas de biotecnología, incluida Arvinas, que utiliza la tecnología PROTAC para desarrollar medicamentos contra el cáncer. Su investigación no sólo contribuyó a una variedad de enfermedades difíciles de tratar, sino que también promovió hasta cierto punto la aplicación clínica de la tecnología PROTAC. Además de perseguir tratamientos contra el cáncer, la investigación y el desarrollo de Arvinas también abarcan otras áreas terapéuticas como las enfermedades neurodegenerativas.
Además, Crews también creó Halda Therapeutics para centrarse en el desarrollo de RIPTAC (proteínas de fusión de objetivos de proximidad inducida controlada). Estos nuevos medicamentos ampliarán el alcance del impacto descubierto por el laboratorio CREWS y representarán nuevas ideas en la lucha contra el cáncer. .
Estamos siendo testigos de una revolución en el descubrimiento de fármacos y la regulación de proteínas que cambiará nuestra comprensión fundamental del tratamiento.
Con el mayor desarrollo de la tecnología PROTAC, veremos que su aplicación en el cáncer y otros campos médicos se generalizará cada vez más en el futuro. La investigación de Crews no sólo representa un gran avance en ciencia y tecnología, sino que también es el mejor ejemplo de dedicación continua a la exploración científica y la mejora médica. En el futuro de la terapia con proteínas, no podemos evitar pensar: ¿se convertirá esta tecnología en un arma importante para vencer las enfermedades más difíciles de la actualidad?