Con el aumento de las enfermedades cardiovasculares, los fármacos antiplaquetarios han atraído cada vez más atención como la principal opción para prevenir la trombosis. Estos medicamentos pueden reducir la agregación plaquetaria y, por tanto, reducir la formación de coágulos sanguíneos, lo que es especialmente importante para la prevención de enfermedades como el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular isquémico.
Los medicamentos antiplaquetarios pueden reducir significativamente el riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y muerte cardiovascular en general.
La función principal de los fármacos antiplaquetarios es interferir en el proceso de activación de las plaquetas y reducir su tendencia a adherirse. Estos fármacos pueden inhibir de forma reversible o irreversible la activación plaquetaria, reduciendo así su agregación. Dependiendo de las diferentes condiciones, los medicamentos antiplaquetarios se dividen en varias categorías, incluidos los inhibidores del receptor de ADP, los medicamentos antiplaquetarios y otros tipos de medicamentos.
En pacientes de alto riesgo, a menudo se utiliza aspirina más un inhibidor de ADP/P2Y en combinación para lograr una mayor eficacia que cualquiera de los fármacos por separado; esta terapia se denomina terapia antiplaquetaria dual (DAPT). Sin embargo, esta terapia debe utilizarse con precaución en pacientes de bajo riesgo porque aumenta significativamente el riesgo de sangrado mayor.
Al considerar la terapia antiplaquetaria, los médicos deben equilibrar el riesgo para el paciente con el riesgo de sangrado asociado con la terapia concomitante.
Consideraciones en el manejo perioperatorioPara aquellos que requieren intervención coronaria percutánea (ICP), generalmente se requiere terapia antiplaquetaria dual durante al menos un mes.
Antes de la cirugía, la terapia antiplaquetaria puede aumentar el riesgo de sangrado y suspender el medicamento puede provocar otros problemas trombóticos. Por lo tanto, los médicos deben evaluar el equilibrio de riesgos entre ambos. Según una revisión de Cohrane de 2018, continuar o suspender la terapia antiplaquetaria no tiene un efecto sustancial sobre la mortalidad, el sangrado mayor o los eventos isquémicos durante la cirugía no cardíaca.
Administración de fármacos antiplaquetarios en la práctica odontológica Los dentistas deben ser conscientes de los efectos de los fármacos antiplaquetarios sobre el tiempo de sangrado prolongado. Al planificar tratamientos dentales que puedan provocar sangrado, es necesario evaluar el riesgo de sangrado del paciente. Interacciones entre alimentos y medicamentosCiertos medicamentos y alimentos pueden potenciar o debilitar los efectos de los fármacos antiplaquetarios, aumentando el riesgo de sangrado o reduciendo el efecto protector de la trombosis. Por ejemplo, algunas hierbas, como la hierba de San Juan y el ginkgo biloba, pueden tener un efecto antiplaquetario.
ResumenEn resumen, los fármacos antiplaquetarios desempeñan un papel indispensable en la prevención y el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. A medida que se conozca más información sobre estos medicamentos, más pacientes podrán disfrutar de los beneficios de estos tratamientos y al mismo tiempo reducir los riesgos. Sin embargo, para cada paciente, el plan de tratamiento más adecuado todavía depende de la evaluación y el asesoramiento de médicos profesionales. ¿También te has preguntado si tu estilo de vida afecta el riesgo de sufrir coágulos sanguíneos?