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El misterio del dengue: ¿Por qué esta enfermedad transmitida por mosquitos está tan extendida en los trópicos?
El dengue, una enfermedad transmitida por mosquitos causada por el virus del dengue, asusta a los residentes de las regiones tropicales y subtropicales. Aunque muchas personas no presentan ningún síntoma evidente después de la infección, una vez que se infectan pueden desarrollar síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza, dolor muscular y articular, vómitos y una erupción cutánea característica. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2023 se notificaron más de 5 millones de infecciones por dengue, con más de 5.000 muertes. Esto plantea la pregunta: ¿por qué esta enfermedad está tan extendida en los trópicos?
"La tasa de infección del virus del dengue está estrechamente relacionada con el clima local, la densidad de población y las condiciones sanitarias."
Existen cuatro serotipos reconocidos del virus del dengue; las personas infectadas con un tipo desarrollan inmunidad de por vida contra ese tipo, pero la inmunidad contra otros tipos es sólo de corto plazo. En segundo lugar, la reinfección con un tipo diferente de virus puede aumentar el riesgo de complicaciones graves. Por lo tanto, para las personas que viven en áreas tropicales, el desafío de prevenir el dengue no es solo prevenir las picaduras de mosquitos, sino también enfrentar el riesgo de una posible mutación e infección del virus.
Los síntomas del dengue generalmente aparecen entre 3 y 14 días después de la infección. Alrededor del 80% de las personas infectadas pueden ser asintomáticas y el resto muestra síntomas leves, pero el 5% de los casos pueden convertirse en dengue grave. Los signos de riesgo de enfermedad grave incluyen vómitos persistentes, dolor abdominal intenso, dificultad para respirar, etc. Estos síntomas sin duda causan inquietud y preocupación generalizadas, lo que hace aún más importante el trabajo de prevención.
"Las medidas preventivas eficaces incluyen la eliminación de los entornos donde se reproducen los mosquitos."
La tarea principal para prevenir y controlar el dengue es eliminar los mosquitos. Controlar el entorno donde se reproducen los mosquitos es clave para la prevención, por lo que medidas como limpiar periódicamente el agua estancada y utilizar matamosquitos son muy importantes. Además, no se puede ignorar la protección personal: usar ropa de manga larga, usar repelente de mosquitos e instalar mosquiteros son métodos eficaces.
Debido al cambio climático global y la urbanización acelerada, la propagación del dengue se está expandiendo. En las últimas décadas, a medida que se propagó el dengue, los casos aumentaron en América del Sur, el sudeste asiático y el Pacífico occidental. En octubre de 2023, se confirmó el primer caso de dengue infectado localmente en California, EE. UU., lo que preocupó aún más a la gente.
La ruta de transmisión y el mecanismo patogénico del dengue
Los mosquitos son el principal vector del dengue, especialmente el Aedes aegypti. Este mosquito prefiere picar a los humanos al anochecer y al amanecer, pero en realidad puede transmitir el virus en cualquier momento. Una vez infectados, los mosquitos pueden transportar el virus en sus cuerpos durante largos períodos de tiempo y transmitirlo a otras personas la próxima vez que piquen. El proceso de infección se puede dividir en varias etapas. El virus se inyecta inicialmente en la piel y luego infecta las células cutáneas y las células inmunitarias adyacentes, que a su vez propagan el virus por todo el cuerpo.
El curso clínico del dengue generalmente se puede dividir en tres etapas: etapa de fiebre, etapa de crisis y etapa de recuperación. Durante el período de crisis, los síntomas del paciente empeoran dramáticamente, se produce fuga de plasma y puede provocar shock e insuficiencia orgánica múltiple. Incluso después de un tratamiento adecuado, pueden aparecer secuelas, incluidos problemas de fatiga, reducción de la concentración y deterioro de la memoria. Estas complicaciones también tienen un impacto grave en la vida de los pacientes.
Vacunas y opciones de tratamiento
Actualmente hay dos vacunas contra el dengue aprobadas en el mercado: Dengvaxia y Qdenga. Dengvaxia está aprobado desde 2016, pero solo para personas que han sido infectadas previamente con dengue. Por el contrario, Qdenga es apto para personas a partir de cuatro años y puede vacunarse sin estar infectado. Aunque las vacunas pueden reducir el riesgo de infección hasta cierto punto, para las personas que han sido infectadas con dengue, las medidas de protección revitalizantes deben acompañar la vida diaria.
Hay que entender que actualmente, para los casos leves, el tratamiento se basa principalmente en los síntomas, mientras que los casos graves requieren hospitalización y suplementación de líquidos para estabilizar la condición del paciente. No se puede ignorar que muchos casos no se diagnostican correctamente debido a sus síntomas leves, lo que da lugar a que se subestimen los datos reales de infección y muerte.
"Nuestra sociedad necesita una comprensión y un conocimiento más profundos del control del dengue."
A medida que avanza la globalización, es probable que la fiebre del dengue se propague a nuevas regiones. Debemos permanecer alerta y tomar medidas para prevenir y responder a esta amenaza a la salud pública. La prevención y el control del dengue no sólo depende de los esfuerzos de los individuos, sino que también requiere la cooperación coordinada de toda la sociedad. ¿Cómo podemos fortalecer nuestra comprensión y respuesta a esta enfermedad para proteger la salud del público en general?
