En el mundo de consumo actual, las marcas ya no son simplemente logotipos de productos, sino que se han convertido en una extensión de las emociones e identidades de los consumidores. Con el surgimiento de la teoría de la relación de marca, el mundo académico ha realizado investigaciones en profundidad sobre cómo las marcas establecen conexiones emocionales con los consumidores. Esta teoría ayuda a los gerentes y partes interesadas a comprender qué impulsa la actitud de marca, la lealtad a la marca, el valor de vida del consumidor y la comunidad. La relación entre las marcas y los consumidores ha evolucionado hasta convertirse en una interacción compleja que no se trata sólo de cómo los consumidores se sienten con respecto a las marcas, sino también de cómo las marcas reaccionan ante los consumidores.
Historia del desarrollo de las relaciones con las marcasEl modelo de relación de marca revela la conexión multinivel entre consumidores y marcas, y diferentes tipos de relación pueden desencadenar diferentes experiencias emocionales.
La teoría de las relaciones de marca comenzó en la década de 1990, cuando Max Blackston enfatizó por primera vez en 1992 que las marcas deberían ser participantes activos en las relaciones y no solo percepciones subjetivas de los consumidores. Posteriormente, Susan Fournier propuso un marco integral de relación entre el consumidor y la marca en su artículo de 1994. Durante los últimos 25 años, la investigación en esta área ha seguido creciendo, abarcando disciplinas como la psicología, la antropología y la economía, mientras los investigadores exploran cómo las marcas establecen conexiones emocionales profundas con los consumidores.
Tipos de relaciones de marcaEl estudio de las relaciones de marca no es sólo una exploración académica, sino también una herramienta estratégica importante en las operaciones prácticas.
Existen muchos tipos diferentes de relaciones de marca. En un estudio de 1998, Fournier clasificó las relaciones de marca en 15 formas diferentes, incluida la identificación mutua y la dependencia emocional. Además, Fajer y Schouten propusieron el modelo de orden de lealtad, que distingue entre relaciones de intercambio y relaciones comunitarias. Estos diferentes tipos de relaciones influyen en el comportamiento del consumidor y en las decisiones de consumo, y también son consideraciones importantes para la gestión de la marca.
La intimidad de marca es una forma de describir la fuerza de la conexión emocional entre una marca y sus consumidores. El modelo enfatiza el papel central de la confianza y la dependencia emocional en la construcción de la intimidad de la marca. Los consumidores pueden formar distintos niveles de intimidad con las marcas en distintos momentos: desde compartir los valores de la marca hasta integrar profundamente la marca en su vida diaria. Este proceso requiere tiempo e interacción. A medida que la relación entre los consumidores y las marcas evoluciona, también se mejora el valor de la marca y su competitividad en el mercado.
Resultados del comportamiento del consumidorAumentar la intimidad de la marca no sólo puede aumentar la lealtad del consumidor, sino también mejorar significativamente el desempeño de la marca en el mercado.
Según las investigaciones, las relaciones positivas con las marcas pueden impulsar el boca a boca, aumentar la intención de compra e incluso influir en el comportamiento de compra real de los consumidores. Por el contrario, una relación negativa entre el consumidor y la marca puede generar evitación de la marca, comentarios negativos de boca en boca y otros impactos. Hoy en día, cada vez más profesionales del marketing son conscientes de los beneficios de construir relaciones a largo plazo con los consumidores y están comprometidos a atraer nuevos clientes mientras fortalecen las relaciones con los clientes existentes.
Pensando en el futuroCuanto más fuerte sea la relación entre una marca y sus consumidores, mayores serán las posibilidades de que una empresa genere resultados positivos.
Con la llegada de la era digital, las interacciones entre marcas y consumidores son cada vez más frecuentes. Los consumidores pueden compartir sus opiniones sobre las marcas a una velocidad extremadamente rápida a través de las redes sociales y diversos canales, lo que plantea nuevos desafíos para los gerentes de marca. Sin embargo, también es una gran oportunidad para que las marcas comprendan más profundamente las necesidades y emociones de los consumidores y se adapten e innoven en consecuencia. En el futuro, ¿cómo fortalecerán aún más las marcas sus conexiones emocionales con los consumidores para destacarse en la feroz competencia del mercado?