El síntoma principal del pinzamiento de cadera es el dolor, generalmente en la ingle, la zona lumbar, los glúteos o la parte posterior de la parte superior de la pierna. Los pacientes también pueden experimentar una disminución de la movilidad.
La aparición de esta enfermedad está relacionada con muchos factores, y la estructura pélvica anormal en las mujeres parece ser más susceptible a estos problemas. En particular, debido a que las mujeres tienen una estructura de articulación de la cadera relativamente más estrecha, esta diferencia anatómica las hace más susceptibles al realizar ciertos movimientos. Además, las atletas femeninas a menudo necesitan realizar ejercicios de alta intensidad, y el ejercicio repetitivo también puede aumentar el riesgo de enfermedades, lo que es particularmente prominente en las actividades deportivas de alta intensidad.
Causas del pinzamiento de cadera El pinzamiento de cadera es resultado principalmente del contacto anormal entre la cabeza femoral y la fosa glenoidea, que generalmente está relacionado con una forma anormal de la articulación de la cadera. Según las investigaciones, los pacientes de diferentes géneros tienen diferentes tipos de enfermedad: los pacientes masculinos generalmente muestran una anomalía en "leva", mientras que los pacientes femeninos muestran con mayor frecuencia una anomalía en "pinza". Esto significa que las anomalías de cadera que son más comunes en las mujeres tienen más probabilidades de ponerlas en riesgo de sufrir un pinzamiento severo.Síntomas y diagnóstico del pinzamiento de caderaEl riesgo se duplica para las mujeres que participan en deportes que requieren flexionar frecuentemente las rodillas o rotar las caderas.
La evaluación clínica es el primer paso para diagnosticar el pinzamiento de cadera, pero el diagnóstico puede no ser fácil debido a la naturaleza vaga del dolor. Los síntomas comunes incluyen dolor en la ingle durante el ejercicio y molestias al sentarse en posiciones altas o durante períodos prolongados. Se puede realizar un diagnóstico específico con una combinación de pruebas fisiológicas, como la prueba FADDIR y la prueba FABER. Estas pruebas son efectivas para mostrar movilidad limitada en la articulación de la cadera, lo que puede ayudar al médico a determinar si hay pinzamiento.
Si bien las radiografías pueden ayudar a diagnosticar el pinzamiento de cadera, las investigaciones actuales sugieren que la resonancia magnética puede brindar información más importante en pacientes sin hallazgos de imagen claros.
Actualmente, los tratamientos para el pinzamiento de cadera se pueden dividir en dos categorías: no quirúrgicos y quirúrgicos. Los tratamientos no quirúrgicos generalmente incluyen fisioterapia, evitar actividades extenuantes y tomar medicamentos antiinflamatorios no esteroides. El objetivo principal de la fisioterapia es mejorar la movilidad de las articulaciones y fortalecer los músculos circundantes, mientras que la cirugía se reserva para aquellos pacientes que continúan experimentando síntomas y tiene como objetivo corregir quirúrgicamente cualquier anomalía ósea que esté causando el pinzamiento.
ConclusiónSegún un estudio de 2011, los resultados de la cirugía artroscópica, el enfoque quirúrgico clave para esta afección, son generalmente comparables a otros enfoques, con tasas de complicaciones más bajas.
Hoy en día, la investigación sobre el pinzamiento de cadera continúa para comprender mejor sus causas y tratamientos. Dado que las mujeres tienen riesgos fisiológicos únicos, ¿habrá en el futuro estrategias de prevención y tratamiento más eficaces para reducir el impacto del pinzamiento de cadera en ellas?