El pinzamiento femoroacetabular (FAI) es un problema de salud asociado con una estructura anatómica anormal de la articulación de la cadera, una articulación enrósferica, que ocurre comúnmente en adultos jóvenes y de mediana edad y causa dolor y malestar en la cadera. Esta condición ocurre cuando la cabeza femoral de la cadera no hace contacto adecuado con el acetábulo o no tiene un rango de movimiento normal. El dolor de la FAI a menudo se presenta de manera inconsistente en toda la articulación de la cadera y el área circundante y puede provocar daños en el cartílago articular o en el tejido blando anular, e incluso en algunos casos osteoartritis de la cadera.
El pinzamiento de cadera puede ser asintomático o sintomático y la presencia de síntomas puede interferir con las actividades diarias.
La queja más común entre los pacientes con FAI es el dolor, generalmente en la ingle, la parte superior de los glúteos, la parte inferior de la espalda, el costado de la cadera afectada y la parte posterior de la parte superior de la pierna. La aparición del dolor puede ser repentina o gradual y a menudo provoca una disminución de la movilidad. Los pacientes a menudo no pueden realizar actividades que impliquen una gran flexión de la cadera o estar sentado durante mucho tiempo. Es importante tener en cuenta que algunos pacientes pueden experimentar dolor en la ingle durante ciertas actividades sin antecedentes de traumatismo previo.
El dolor suele ser lo suficientemente intenso como para provocar una reducción de la actividad y una limitación del movimiento.
La FAI se caracteriza por un contacto anormal entre el fémur proximal y el borde acetabular. Los pacientes suelen presentar deformidades de la cabeza femoral o del acetábulo, dislocación de la unión del fémur y el acetábulo, etc. La causa específica de la FAI aún no está clara y puede ser causada por factores congénitos o adquiridos. Hay estudios en el mercado que indican una tendencia creciente de casos que ocurren entre hermanos, lo que sugiere que puede haber un componente genético.
Anatomía de la caderaLa articulación de la cadera se clasifica como una articulación esférica, una articulación sinovial que permite el movimiento y la rotación multidireccionales. La articulación de la cadera está formada por dos huesos entre el fémur y la pelvis, una conexión que conecta el esqueleto central con la extremidad inferior. Sus principales inervaciones son los nervios femoral y ciático.
La evaluación clínica es el primer paso en el diagnóstico, pero debido a la naturaleza inconsistente y ambigua del dolor, es difícil llegar a un diagnóstico definitivo solo con este paso. Se debe obtener un historial médico detallado y actividades actuales. Además, el examen físico debe evaluar la rotación interna pasiva de la cadera para verificar si hay disminución del rango de movimiento; también se deben realizar las pruebas FADDIR y FABER, que son particularmente importantes para diagnosticar lesiones cricoideas.
En la actualidad, la tecnología de fluoroscopia de rayos X se utiliza ampliamente en el diagnóstico preliminar de FAI. Además de las radiografías, también se pueden realizar posteriormente imágenes por resonancia magnética, especialmente cuando no se pueden observar signos claros en las radiografías. La resonancia magnética produce una reconstrucción tridimensional de la articulación, lo que permite una evaluación más clara de la estructura del cartílago de la cadera.
Opciones de tratamientoEl tratamiento de la FAI se puede dividir en no quirúrgico (conservador) y quirúrgico. El tratamiento conservador se suele ofrecer a personas que no han iniciado otros tratamientos y consiste principalmente en fisioterapia y evitar actividades que produzcan dolor. Dependiendo de las necesidades del paciente, las inyecciones articulares de esteroides o ácido hialurónico también pueden ser una opción. Si el tratamiento conservador no logra aliviar los síntomas, se recomienda el tratamiento quirúrgico para corregir las anomalías óseas y el daño de los tejidos blandos que causaron el pinzamiento y, de ese modo, mejorar el ajuste de la cabeza femoral y el acetábulo.
EpidemiologíaLa tasa de éxito del tratamiento quirúrgico es generalmente alta y la mayoría de los atletas pueden regresar con éxito al campo competitivo.
Existe una investigación limitada sobre la prevalencia de FAI en la población general, pero múltiples estudios sobre atletas jóvenes han demostrado una mayor incidencia en personas blancas y en algunos deportes (por ejemplo, hockey sobre hielo, tenis y fútbol) tienen una mayor incidencia de anomalías de la cadera.
El estudio del pinzamiento de cadera no solo nos proporciona una comprensión de la estructura ósea y los síntomas relevantes, sino que también nos recuerda los riesgos potenciales y la importancia del mantenimiento en nuestra vida diaria. Entonces, después de comprender los diversos síntomas y tratamientos de la FAI, ¿prestará más atención a la salud de su cadera?