En el sistema inmunológico, las células T asesinas naturales (células NKT) desempeñan un papel único y sorprendente. Aunque estas células sólo representan aproximadamente el 1% de las células T de sangre periférica, exhiben funciones sorprendentes y pueden responder y defenderse rápidamente contra una variedad de infecciones microbianas. ¿Cómo lo hacen? Este artículo explorará las características, funciones e importancia de las células NKT en la lucha contra las infecciones.
Las células NKT son una combinación de células T y células asesinas naturales cuya especificidad les permite reconocer antígenos no polimórficos presentados por las moléculas CD1d.
Las células NKT se pueden dividir en varios tipos principales, incluidas las células NKT invariantes (células iNKT) y otras células T restringidas a CD1d. Los receptores de células T (TCR) de estas células son altamente adaptables, lo que les permite reconocer rápidamente antígenos asociados con lípidos y glicolípidos propios y exógenos.
Después de ser estimuladas, las células NKT invariantes producirán rápidamente grandes cantidades de interferón y otras citoquinas, activando así varios componentes del sistema inmunológico.
La función principal de las células NKT radica en su capacidad de responder rápidamente ante las amenazas. Después de recibir señales de activación, estas células pueden liberar grandes cantidades de citoquinas, como interferón gamma (IFN-γ), IL-4 e interleucina-17 (IL-17). Estas citoquinas no sólo mejoran la respuesta inmune general, sino que también mejoran el papel de las células B en la lucha contra las infecciones microbianas.
Las células NKT no solo poseen vectores antibacterianos, sino que también desempeñan un papel clave en la regulación de las respuestas inmunitarias.
Las células NKT son capaces de reconocer y atacar antígenos lipídicos protectores producidos por microorganismos, lo que las hace particularmente importantes en la prevención de infecciones. Cuando los TCR se unen a los lípidos presentados por las moléculas CD1d, las células NKT inician una serie compleja de respuestas inmunitarias que movilizan rápidamente el resto del sistema inmunitario.
Por ejemplo, las células NKT son fundamentales para responder a bacterias parásitas como Mycobacterium tuberculosis. Estas células pueden iniciar rápidamente una respuesta inmune, no solo combatiendo directamente a los patógenos, sino también promoviendo la función de otras células inmunes para formar un sistema de defensa biológica eficaz.
Las células NKT pueden ejercer poderosas capacidades antiinfecciosas a través de su diversidad y especificidad, mejorando así la estabilidad inmune del cuerpo.
Debido a la importancia de las células NKT, muchos estudios se han centrado en su papel en enfermedades autoinmunes, enfermedades alérgicas y cáncer. Los estudios han demostrado que la disfunción y la reducción del número de células NKT están asociadas con el desarrollo de diabetes, aterosclerosis y asma en humanos.
Los estudios clínicos han demostrado que la actividad de las células NKT puede proporcionar un nuevo método de tratamiento que puede ayudar a mejorar la función inmune de los pacientes.
Con una mejor comprensión de las células NKT, la comunidad científica espera revelar más detalles sobre cómo funcionan en las infecciones microbianas. Esto puede conducir al desarrollo de nuevas terapias, lo que las convierte en una posible clave para el tratamiento de diversas enfermedades inmunitarias.
Sin embargo, todavía necesitamos más datos y pruebas que respalden estas opiniones. El mecanismo operativo de las células NKT aún no se ha comprendido completamente, entonces, ¿cómo afectarán estas células a las futuras estrategias inmunitarias en el entorno microbiano en constante cambio?