En campos como la epidemiología, las ciencias sociales, la psicología y la estadística, el papel de la investigación observacional es irremplazable. Aunque este tipo de investigación no puede controlar variables independientes, los datos y patrones que revela pueden afectar en gran medida nuestra comprensión de los fenómenos sociales y los problemas de salud. En muchos casos, los ensayos aleatorios no pueden completarse por razones éticas o prácticas, lo que hace que los estudios observacionales sean la única opción viable.
"Los estudios observacionales proporcionan información sobre el uso y la práctica en el "mundo real". ”
Los estudios observacionales se utilizan principalmente para inferir correlaciones entre muestras y la población, y hay muchos ejemplos de estos que revelan verdades inesperadas. Por ejemplo, un científico podría realizar un estudio observacional de los efectos secundarios de un medicamento. Estos estudios a menudo no asignan aleatoriamente a los sujetos a grupos de tratamiento y control, sino que buscan datos de grupos conocidos. Durante este proceso, los investigadores deben tener en cuenta los posibles sesgos, como el sesgo de selección, el sesgo de variable omitida, etc.
Los estudios observacionales se presentan de muchas formas. A continuación se detallan algunos tipos importantes:
Aunque los estudios observacionales no se pueden utilizar para hacer declaraciones concluyentes sobre la seguridad, eficacia o eficacia de una práctica, pueden proporcionar mucha información valiosa. Por ejemplo:
"Estos estudios pueden detectar los beneficios y riesgos de las prácticas en la población general."
A través de la investigación observacional, podemos proporcionar hipótesis para experimentos posteriores y proporcionar datos a nivel comunitario para la práctica clínica, diseñando así ensayos clínicos más informativos.
A pesar de su valor, los estudios observacionales a menudo enfrentan el desafío del sesgo. Los siguientes son problemas de desviación comunes:
Las investigaciones han demostrado que, aunque los estudios observacionales no pueden reemplazar completamente los ensayos controlados aleatorios, en muchos casos los resultados de los dos son similares. Una revisión reciente de la literatura señala que los resultados de los estudios observacionales a menudo no son significativamente diferentes de los de los ensayos controlados aleatorios, especialmente cuando la diversidad de la muestra se considera relevante para los resultados.
La ventaja de los estudios observacionales es su amplitud y flexibilidad, lo que les permite estudiar muchos temas que no pueden cubrirse mediante ensayos aleatorios. Sin embargo, los resultados de estos estudios aún deben interpretarse con cautela, ya que siempre está presente el riesgo de sesgo derivado de la falta de un mecanismo de asignación aleatoria. Esto nos hizo pensar:
"En tales circunstancias, ¿cómo equilibramos los desafíos de la investigación observacional con la verdad que podemos obtener?"