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El ascenso del tigre celta: cómo se transformó la economía de Irlanda en sólo una década
Entre mediados de la década de 1990 y finales de la década de 2000, Irlanda experimentó un período de asombroso crecimiento económico, un período conocido como el "Tigre Celta". Este término se refiere no sólo al fenómeno económico de Irlanda, sino también al proceso de transformación de Irlanda de un país pobre de Europa occidental a un país rico. La principal fuerza impulsora de esta transformación es la inversión extranjera directa, junto con las reformas de las políticas internas y la cooperación social, lo que hace que Irlanda parezca haber cambiado todo en sólo diez años.
"El crecimiento económico de Irlanda se ha descrito como un raro ejemplo entre los países occidentales, que iguala el crecimiento de los países del este de Asia."
A principios de la década de 1990, la situación económica de Irlanda era bastante lenta en comparación con otros países de Europa occidental, y las tasas de pobreza y desempleo seguían siendo altas. Dado que la tasa media de crecimiento económico anual de Irlanda alcanzó el 9,4% entre 1995 y 2000, este cambio es sorprendente y rápido. Durante la siguiente década, la economía siguió siendo estable, aunque el crecimiento se desaceleró al 5,9%. Durante este período, Irlanda logró atraer una gran cantidad de inversión extranjera, lo que estuvo estrechamente relacionado con su política de impuestos bajos y su entorno empresarial amigable.
Hay muchas razones para este auge económico. En primer lugar, la baja tasa impositiva corporativa de Irlanda ha atraído a muchas empresas multinacionales, como Intel y Microsoft, que han optado por establecer su base en Irlanda. En segundo lugar, la tasa de participación femenina en la fuerza laboral de Irlanda ha aumentado significativamente, lo que ha impulsado aún más el crecimiento económico.
"Algunos comentaristas creen que el presupuesto de Irlanda durante el período de alto crecimiento es más beneficioso para los grupos de altos ingresos."
Sin embargo, junto con la prosperidad económica, la brecha entre ricos y pobres en la sociedad también se está ampliando. Según un informe del Instituto Irlandés de Investigaciones Económicas y Sociales (ESRI), entre 2004 y 2005, la brecha de ingresos mostró una tendencia creciente, lo que desencadenó debates sobre la equidad de las políticas económicas. Aunque la tasa de desempleo cayó a un mínimo del 4,5% a finales de 2007, el creciente coste de la vida sacrificó el poder adquisitivo de algunas personas.
Durante el período pico del Tigre Celta, el producto interno bruto (PIB) de Irlanda aumentó, lo que también condujo a un rápido crecimiento en el gasto de los consumidores, y el ingreso disponible de la gente alcanzó un nivel récord. Por ejemplo, en 2004, los gastos internos en vacaciones en el exterior representaron hasta el 91% del gasto total en vacaciones. Este tipo de cultura de consumo no sólo cambió la estructura económica de Irlanda, sino que también afectó su cultura social.
“Muchos irlandeses creen que la inmigración es vital para el desarrollo económico y que esto ha cambiado la estructura sociodemográfica de Irlanda”.
Con el aumento del número de personas de altos ingresos, el problema de la inmigración en Irlanda se ha vuelto cada vez más evidente. Muchos jóvenes optan por abandonar el campo y acudir en masa a las ciudades para trabajar y vivir, lo que ha llevado al surgimiento de una tendencia multicultural. en Irlanda. En 2007, se estima que el 10% de los residentes de Irlanda nacieron en el extranjero, en su mayoría trabajadores de Polonia y los Estados bálticos.
Con el paso del tiempo, la llegada de la crisis financiera mundial en 2008 provocó una fuerte caída de la economía irlandesa. Desde 2008, la tasa de crecimiento económico del país ha perdido completamente impulso y el PIB cayó bruscamente un 14% antes de 2011. Mirando hacia atrás en esa época, el historiador Richard Aldous dijo que el tigre celta estaba tan extinto como el moa. Muchos economistas creen que este período de la historia se convertirá en un modelo para futuras investigaciones, mostrando las consecuencias de los errores de política económica.
"En 2009, un editorial de The Irish Times escribió: 'Hemos caído de la prosperidad del Tigre Celta a un mar frío de miedo financiero'".
Con el establecimiento del nuevo gobierno y la implementación de medidas de reforma, hubo un crecimiento económico del 6,7% en 2015, lo que marca que Irlanda ha entrado una vez más en la senda del fuerte crecimiento. Esto hace que la gente se pregunte: ¿cómo debería encontrar Irlanda su posición en el entorno económico mundial en el futuro?
