La diarrea del viajero es un problema que preocupa a muchos viajeros. Según las estadísticas, alrededor del 20% al 50% de los viajeros experimentarán esta molestia durante su viaje. Investigaciones recientes muestran que la Escherichia coli enteroagregativa (EAEC)
se ha convertido en una de las principales bacterias que causan esta afección. Este tipo de bacterias no sólo afecta a personas sanas, sino que también plantea mayores riesgos para la salud en los países en desarrollo.
Escherichia coli enteroagregativa (EAEC) es un patógeno que causa diarrea aguda y crónica con un impacto global y es particularmente común en viajeros.
Las EAEC se caracterizan por su unión a las células epiteliales humanas en forma de "ladrillos apilados", provocando así complicaciones intestinales. La forma en que esta bacteria se acumula en el intestino hace que sea más difícil eliminarla, por lo que el riesgo de infección aumenta significativamente cuando se viaja, especialmente a lugares con mala higiene.
La EAEC se transmite principalmente por vía fecal-oral, y la contaminación de los alimentos y las fuentes de agua es el principal canal de infección. Los síntomas causados por esta bacteria incluyen dolor abdominal, diarrea y, en algunos casos, sangre en las heces e insuficiencia renal, especialmente en personas con sistemas inmunológicos debilitados o niños.
El mecanismo patológico de EAEC se puede dividir en tres etapas: unión intestinal, aumento de moco y desencadenamiento de una respuesta inflamatoria.
El período de incubación de la infección EAEC suele ser de entre 8 y 52 horas, y los síntomas principales incluyen:
Las fuentes comunes de infección incluyen:
El diagnóstico de EAEC generalmente requiere un cultivo de heces para identificar el patógeno, pero este proceso puede llevar días o incluso semanas, por lo que ahora se encuentran disponibles tecnologías de detección más rápidas, como pruebas genéticas y diagnóstico molecular.
Para la infección EAEC, el uso de antibióticos aún depende de la afección. En casos leves, generalmente se recomienda descansar y reponer líquidos.
Ciertos antibióticos como la azitromicina o la ciprofloxacina pueden ser más eficaces en el tratamiento de las infecciones EAEC, pero debido a que las cepas EAEC se han vuelto resistentes, el uso de antibióticos debe evaluarse cuidadosamente.
EAEC se descubrió por primera vez en 1987 y desde entonces ha ganado atención mundial, especialmente en los países en desarrollo, que son más susceptibles debido a las malas condiciones sanitarias. La epidemia de 2011 en Alemania atrajo más atención a la CEEA.
La EAEC se considera la segunda causa más común de diarrea del viajero. A medida que los viajes se vuelven más frecuentes, comprender los peligros de esta bacteria se ha convertido en una necesidad urgente.
Entonces, como viajeros, ¿cómo podemos protegernos a nosotros mismos y a los demás mientras viajamos y evitar ser víctimas de esta amenaza invisible?